Más de un centenar de ballenas han muerto en las costas de Farewell Spit,Nelson (Nueva Zelanda). Quedaron encalladas en la arena. Turistas y voluntarios lograron devolver al mar con vida algunos ejemplares. No encuentran explicación a esta afluencia de ballenas que quedan encalladas.
¡Qué desgracia!, sobre todo sabiendo que están en peligro. Esperemos que se salven la mayoría.
ResponderEliminarSaludos
A mi ver animales que mueren, sin motivo, me da mucha pena, querido Caballero :)
ResponderEliminarBesos y bona nit :)